Recortes y sacrificios

La prensa, prolífica, da noticias constantes, algunas que llaman la atención. Un camionero de Gales del Sur (Port Talbot), que había pedido una indemnización de 100.000 libras, por una grave invalidez derivada de un accidente de tráfico, es cazado en Facebook cuando publica unas fotos de su gira vacacional italiana conduciendo su propio vehículo por el lago Di Garda. Dentro del engaño emerge la estupidez humana.  Otra, el gobierno de Gales pretende prohibir fumar en el coche y juzgar a aquellos automovilistas que fumen en un vehículo con los niños dentro. Parafraseando a Sara Montiel fumando espero el juicio más severo. Más, una pelirroja indómita de nombre Rebbekah Brooks hace tambalear el imperio del magnate de la prensa, Murdoch, en el Reino Unido, por unas escuchas telefónicas ilegales. Las secuelas posiblemente lleguen a EEUU, porque las desgracias nunca vienen solas.
Un fármaco, el ranibizumab, puede no ser financiado con el National Health Service británico. Este fármaco que mejora la retinopatía diabética y la visión de estos pacientes,según los investigadores, no supera la relación coste-beneficio del tratamiento con láser de la enfermedad. . El tratamiento de cada ojo con rabimizumab cuesta 9.000 libras. Los usuarios ingleses protestan en los diarios porque se les niega los que consideran un avance. Y es que cuando no hay harina todo es mohina.

Los italianos tendrán que pagar por acudir a la consulta del médico especialista y a las urgencias de los hospitales si éstas no derivan finalmente en ingreso.Por contra el diario italiano "La Reppublica" publica los gastos mensuales de los diputados, sus familias y sus ex en asistencia sanitaria. No crean que es restrictiva y menos austera,como se le pide a la población. Incluye psicoterapia, curas termales, fisioterapia, dentista que comprende tratamiento de las caries, empastes, mejoría estética de la dentadura, con un límite máximo en cinco años de 23.240 € por familia, el coste de las gafas etc. Total 30.000 euros al día , 850.000 al mes y diez millones al año, para un colectivo entre diputados y senadores de 945 personas y sus familias.Y esta casta desde su atalaya privilegiada, no quiere ver que para exigir sacrificios ellos tienen que ser los primeros en practicarlos.
Los que mataron el Estado del Bienestar no quieren hacerle la autopsia no sea que la cadaverina lleve el ADN de todos los dirigentes incompetentes, nacionales e internacionales, que precipitaron el desastre.
Arrojemos a todos ellos, metafóricamente, por la roca Tarpeya.