La muerte de un dictador

   Las exequias de Kim Jong il mostradas al mundo como el homenaje póstumo que los coreanos de Norte tributan al líder muerto del país, es un ejemplo de cómo un régimen dictatorial , férreamente opaco a la información, donde los medios de difusión nacionales (prensa,radio y TV) no pueden salirse de la partitura que el régimen les exige, y sin embargo, muestran al exterior, la magnitud de unos funerales en consonancia con el culto a la personalidad del dirigente fallecido.

Un reportaje frío por las condiciones meteorológicas, frío por la minuciosidad y matemática puesta en escena, gélido porque no despierta en el espectador ni la más mínima conmiseración hacia la persona desaparecida. Histéricas e histriónicas son las manifestaciones de dolor de las personas presentes mientras desfila el cortejo fúnebre, que  llega a producir en el espectador rechazo por la sospecha de la teatralización de las emociones impuesta por las autoridades. Hay que enseñar al mundo lo bien amado y respetado que Kim Jong il era por su pueblo ,en el último momento.Ese pueblo no habla. Ese pueblo del que no sabemos nada, ni cómo viven, ni cómo mueren, aunque de tanta oscuridad se deduce que no hay nada bueno que enseñar al otro lado.Por no haber nada bueno no hay ni disidentes que vivan en el país y si los ha habido están callados, presos o muertos.

Manifestaciones donde los diseñadores del evento han podido inspirarse ha habido en la historia. Las inmensas y perfectas alineaciones de Hitler con sus soldados desfilando al paso de la oca, filmadas por Leni Riefenstahl y las espectaculares paradas militares de la URSS con los grandes retratos de Lenin y Stalin en la plaza Roja, con gran participación humana y armamentística. En suma gran manifestación mortuoria perfectamente orquestada y con una intención propagandística. Ha desaparecido un dictador. Lo malo es que, al norte del paralelo 38 la dinastía tiránica se perpetúa en su obeso hijo Kim Jong II

Los envases alimentarios ¿son seguros?

Los plásticos o resinas sintéticas constituyeron un paso muy importante en la conservación de los alimentos a partir de la segunda guerra mundial. Además de proteger el contenido, los envases plásticos son fáciles de manipular, procesar, almacenar y transportar merced a su liviandad. Desde el nylon, algunos recordarán las medias que lucían las actrices de Hollywood hechas con este material, han surgido más de 60 tipos y subtipos. Se utilizan para contener alimentos sólidos, semisólidos y líquidos e incluso permiten, en los precocinados, pasar del frigorífico al horno o microondas y ser consumido a continuación.

No obstante, siempre hay algún pero.En su fabricación y terminación, interviene elementos químicos que pueden ser nocivos para la salud. Me estoy refiriendo al bisfenol A(BPA). Este producto bifenólico interviene en la producción del policarbonato y de las resinas epoxi. El primero es el plástico más duro, prácticamente irrompible y se ha usado para la fabricación de biberones, contenedores de agua, material médico y dental, empastes,selladores,lentes,DVDs,electrodomésticos etc.El segundo sirve para revestir el interior de las latas evitando su oxidación. Emparentado con los estrógenos, el efecto hormone like del BPA puede engañar a los receptores estrogénicos ocasionando problemas de salud. El 96% de las embarazadas presentan BPA en orina, con lo que la exposición del feto está asegurada. Se relaciona ésta con alteraciones neurológicas y ulteriormente puede producir pubertad precoz. La exposición perinatal aumentaría el tamaño de la próstata adulta y alteraría el tejido mamario lo que le incriminaría en un mayor riesgo de cáncer.Todos los trabajos publicados,más de doscientos, se han efectuado con ratones o simios, salvo el de Lang et al, publicado en JAMA en 2008, en el que los que los autores constatan una relación significativa entre los niveles de Bisfenol A y la diabetes, enfermedad cardíaca y aumento de las enzimas hepáticas.

Se habla de lixiviación,cuando las partes solubles de una sustancia se liberan y pasan al contenido del recipiente. Esto pasa con el BPA que al lixiviarse es cedido al alimento. Los biberones fabricados con policarbonato y por tanto con BPA han sido restringidos en Canadá, Noruega, Japón y algunos estados de EEUU. Desde Junio de 2011y por una directiva europea,se prohibe en Europa la importación,fabricación y venta de biberones con BPA.Al proceder a su esterilización y calentamiento en el microondas se libera BPA a la leche.

  La mayor vulnerabilidad humana a sus efectos es en los períodos prenatal y perinatal. La capacidad de detoxicación del feto no comienza hasta los seis meses de embarazo.Las grandes compañías alimentarias y envasadoras intentan minimizar el efecto del BPA, en los medios, viendo en peligro sus intereses. Una de las razones que aducen es que el bisfenol A se elimina rápidamente. No dicen nada de la exposición diaria y prolongada al producto.

Es prudente, hasta que los estudios arrojen más luz sobre este tema, evitar aquellos productos que contienen BPA. Observen la base del recipiente plástico y encontrarán un triángulo y en su interior un número. Los más seguros son el 2, 4 y 5. Se considera seguro el vidrio para los alimentos, por eso los tuppers ,deberían ser de cristal y únicamente la tapa de plástico. No calentar en el microondas alimentos contenidos en recipientes plásticos.El agua contenida en botellas o bidones fabricados con PET (tipo 1) no debería beberse y menos reutilizar el envase. El agua que ofrece más garantías sanitarias, es la corriente potable o la envasada en vidrio.No consumir latas o botes de alimentos (su interior está recubierto con resina epoxi).Los envases tetrapak, son seguros.